Ayer nació una
camada de gatitos de la hembra Piruja.
Como recordaréis ella iba a ser operada con el resto de hembras, pero se escapó
cuando la sacábamos del trasportín para pincharle la anestesia.
Se marchó despavorida y después regresó pero no me dejaba cogerla.
Al cabo de unos días apareció con una pata rota y buscando protección, no
paraba de ronronear. El veterinario me recomendó dejarla recuperarse de forma
natural en casa y dejar la operación para más adelante, ya que se ponía
histérica nada más verlo y trepaba por la pared buscando huir.
Sin embargo, cuando ya empezaba a estar recuperada y se la podía
operar, tenía una barriga enorme y estaba a punto de parir. Y ayer ocurrió,
tuvo tres cachorritos. A veces tardan un día entero en parir, pero como el último nació ayer a las 18:00, creo que ya no tendrá más.
La camada
más frecuente es de cuatro gatitos, pero a veces incluso he visto cinco, aunque a los gatos callejeros que viven sin protección ni cuidados humanos les suele sobrevivir uno nada más.
Hay una hembra tricolor arlequín con predominio de blanco. Ya
sabéis que las tricolores siempre son hembras. Los otros dos son uno naranja y
otro negro, y pueden ser machos o hembras, todavía son muy peques para saberlo.
Piruja se ha portado muy bien como mamá, los tuvo muy rápido y los ha limpiado
perfectamente. Los deja solitos muy a menudo para comer, cosa que no es
demasiado frecuente durante el primer día, pero vuelve muy rápido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario